martes, 10 de enero de 2012

DEL PASADO EFIMERAMENTE PRESENTE






                DEL PASADO EFÍMERAMENTE PRESENTE





               (8 de enero de 2012)









A veces, hay que detenerse y zambullirse en tú mente. Tienes que salir y buscar como bucear, sin que te atrape la red del dolor, el rencor, el resentimiento y la embriaguez que producen los buenos recuerdos, de lo que pasó y no volverá a ser. Esto es difícil…puesto que generalmente vivir con rencor y resentimiento, le convierte a uno a veces en atacante y atalaya defensiva. Entre mis recuerdos, pasados y presentes…que aún siguen vivos, está el haber sido demasiado ingenuo, inocente y vivir en una irrealidad fantasiosa perpetua. Creía que mis ideas y fantasías eran verdad .No me integraba en la realidad. Cuando era un chaval-, atiéndeme lo he sido igual que todos vosotros-…me aterrorizaba, me daba pánico trabajar en cualquier lugar. Mis padres, que eran unos cretinos e ignorantes paletos-y no por que yo me creyera mejor que ellos, en absoluto-, les importaba mas que trabajara que estudiara. No fue ni lo uno, ni lo otro. Y así me ha ido, en ocasiones. Si bien  yo era un inadaptado, mis padres no me ayudaron precisamente. Si bien yo era un paleto ingenuo, a merced de la maldad de los demás…eso, me abrió las puertas a volverme hostil y desconfiado. Mi padre dejo de trabajar a los 38 años y mi madre acarreaba todo el peso. Es decir, con seis hijos y una casa. Mi padre tenía problemas de espalda….y todo eso. Siempre le vi muy sano y muy cabrón. Siempre recriminándome,  que trabajara, que yo no valía para nada y me echaba de casa. Mis otros hermanos pensaban lo mismo que él, pero eso es otra historia. A mis dieciocho años, me uní a un grupo de la JOC- Jóvenes obreros Cristianos (O eso decían ellos)-. Una buena escuela, para aprender lo que era le gente y entre esos cabrones  yo….fui aprendiendo. Me convertí en un trepa Me enamoré de algunas chicas. (Hoy me parecen feísimas) Había un tipo, que era gordo y feo y que se reía de mí, por que yo desconocía el mundo laboral. Le gustaba la misma chica y atacaba. Un crétino, al final se quedó con la chica-afortunadamente-y fui expulsado de la JOC. Me odiaban sin demostrarlo. No les gustaba y entiendo, por que. Yo era de otra especie. Un género único. Ellos, unos paletos ordinarios, sin más convicciones y destino, que vivir integrados en la manada. Aquello era chusma ilustrada. Dan náuseas. Había un diacono, que me trataba como si fuera subnormal y yo lo era. De alguna manera le adopté a él, como padre putativo. Cuando fui a currar varias veces y me asuste-saliendo de mi burbuja-, vi la mezquindad en los barriobajeros empleos, sin contrato…y como me trataban. Todos se reían de mí y se burlaban. Se creían mejores por que trabajaban, esclavos de un sueldo. No salían adelante por eso…sino por que no tenían nada mas en la vida. Y aún así, esa gente, se creía mejor que tú. Unos paletos, incapaces de formar un a frase, que se enorgullecían de no leer y no ilustrarse. A lo largo de mi escabrosa vida laboral y sexual, vi  y viví cosas equivocadas. Mi actitud dejaba bastante que desear. Pero el mundo laboral español, era mezquino-era y es-, rastrero…repugnante, insidioso lleno de puñaladas traperas. Una mierda. Yo iba de luchador de mis derechos, pero era un trabajador en ocasiones torpes y lento en la adaptación. Mis compañeros unos lerdos y paletos voluntarios. Los encargados me chuleaban, los compañeros se burlaban de mí. Incluyendo a mis propios hermanos y parientes que me tomaban por un vago e inútil…siempre eran mejores que yo. Ellos tenían empleos de mierda, recomendados o enchufados por este o por aquel.-. Yo o era despedido de los empleos- mozo de limpieza, almacén y todo eso-o me iba por mi propia cuenta. La vida con mis padres era una mierda, un infierno. Querían que trabajara, no por mí, sino por ellos…no tenían como salir adelante, esos inútiles…paletos. Mi vida laboral es patética, pero los demás…los demás que me rodeaban, eran peores. Nunca me comprendieron. Recuerdo en una ocasión que en un empleo de mierda, con un compañero de mierda, le dije que tenía una novia que me gustaba mucho .El tipo que la trajera a trabajar, a ver si la follaba. El tipo, un tal Raúl o algo así, no llegaba al metro sesenta y cinco. Yo mido un metro setenta y siete. Yo callaba, sin saber que hacer y me bloqueaba. Esa novia, era una tía muy sucia. Una vez que quise follar con ella, mostró unas bragas sucias, con restos de menstruación   y se enorgullecía de  ello. Yo, como un baboso quería meterla como fuera. No tenía dignidad. Esa novia, guarra, vamos a decirlo así…me dejó por un encargado de la tienda en la que, ella  trabajaba. Aja, ella venia a comer a mi casa y un día, me llamo por teléfono. No iba a volver conmigo. SE IBA CON EL OTRO. Han pasado mas de veinte años y me hizo un gran favor…un enorme favor. Es  como si me hubiera tocado la lotería. Gracias  a todos los desdichados inútiles, que solo saben trabajar, que me han ayudado tanto, incluyéndome a mi, un desdichado en aquel entonces sin dignidad. Yo, que soñaba con ser como ellos…TENIENDO MUCHISIMO MAS.

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